Deco: dónde compré muebles para mi hogar

Como les prometí en un post anterior, de a poco voy a ir contándoles cómo organicé mi nuevo hogar , dónde hice compras y de qué forma planifiqué cada ambiente. En este post quiero compartir con ustedes cómo elegí los muebles que compré especialmente, de qué forma reutilicé los que ya tenía y, como siempre, hacerles algunas sugerencias. Espero que les guste y les sirva.

Todo comenzó con un plano. El departamento en el que vivo hoy ya era mío antes de mudarme, pero estaba alquilado. Lejos de conocerlo en profundidad, solo lo había visto una vez durante su construcción y los únicos planos que tenía no eran los definitivos. A pesar de eso decidí buscar los muebles con bastante anticipación: para amortizar el gasto (con cuotas) y comenzar a comprar «lo grande».

Todo siguió con un tablero de Pinterest. Mi herramienta básica y primer fuente de búsqueda para cualquier proyecto. Tenía en mente el estilo escandinavo y mi primeras palabras clave para encontrar inspiración fueron «scandinavian style». Los resultados fueron tan abrumadores que pasé varias horas (intercaladas) pineando lo que me gustaba. Hice varios boards, que pueden ver aquí.

El siguiente paso fue buscar los nombres de las mesas y sillas que más me habían llamado la atención para comenzar a buscarlos en nuestro país. Obviamente, Google fue la herramienta elegida. Otra vez los resultados fueron muchos, pero de a poco fui enviando mails, haciendo llamados, pidiendo presupuestos y comparando precios. Hacer el primer contacto vía correo electrónico o por teléfono es siempre una buena opción, pero a veces también es bueno ir a ver el producto, si es que hay un showroom o local para visitar.

Les cuento dónde compré varios de los muebles que hoy tengo en mi casa:

[subtitle] LIVING Y COMEDOR [/subtitle]

Mesa, sillas y mesa ratona: Kikely
Las compré con mucha anticipación, pero fueron el puntapié para marcar el estilo del ambiente principal de la casa. Elegí la mesa Eames DSW Rectangular, con tapa de vidrio de 1,40 x 0,80 mts. Mi inclinación hacia la tapa de vidrio fue por el peso visual de la mesa que, al ser transparente, es mucho menor. Me gusta y si bien tiene presencia en el ambiente, al ser con tapa de vidrio se integra mucho mejor.

Las sillas que elegí fueron: Sillas Eames DSW blancas y Sillones Eames DAW blancos. Compré 6 sillas y dos sillones.
Ahora Kikely tiene un local en Av. del Libertador (del lado de provincia), pero cuando compré aún estaban en Villa Ballester. Tuve una muy buena experiencia con ellos, me atendieron súper bien, cumplieron con la entrega y me ofrecieron formas de pago variadas.
Si bien compré los muebles con anticipación, quiero contarles que, todos los que compré, eran para armar, por lo que ocupaban mucho menos espacio del que uno puede pensar. La mesa vino en una caja fina, al igual que las mesitas ratonas. Las sillas traían las patas por lado y el cuerpo por el otro y fueron fáciles de armar. Como les comenté, todavía estoy pagando los muebles y gracias a mi anticipación pude evitar los aumentos de precio que hubo desde que los compré.

Cuando llegó el momento de comprar los muebles no me sobró presupuesto para elegir uno en el que apoyar el televisor. Para completar el living compré un sillón y reutilicé un mueble que tenía en mi antigua habitación.
El mueble que ya tenía lo había mandado a hacer (2 años atrás) a Arte en Madera Muebles, un local sobre Av. Juan B. Justo. Ellos tienen en su catálogo unas bibliotecas con estantes cuadrados y elegí hacer dos: una rectangular con 6 cubos y una cuadrada, con cuatro cubos. Originalmente estaban separadas pero ahora, en mi living comedor, están juntas. Todavía no está ordenado del todo, pero ubiqué parte de la vajilla, algunos libros, juegos de mesa, golosinas, la caja con cables y cargadores y, en la parte superior, el televisor, algunas plantas y un par de cuadros.
Si les interesa algo similar pueden consultar. A esa altura, sobre Av. Juan B. Justo hay un montón de fabricantes de muebles.
El sillón lo compré en Lamino, que fue una sugerencia y recomendación de una de mis mejores amigas. Fue un hallazgo y tuve una muy buena experiencia de compra con ellos. Elegí el modelo, el relleno de los almohadones, la tela, las patas, etc. El precio también fue un factor clave, porque era alrededor de un 40% menos de lo que pedían otros que tenían exactamente el mismo producto. Mi elección fue un sillón con puff, para usarlo en «L».

[subtitle] ENTRADA [/subtitle]

La mesa de arrime para la entrada fue mi adquisición más reciente. No la consideré algo básico a la hora de comprar los muebles, pero si noté que era necesaria. Después de buscar en Mercado Libre y de pedir varios presupuestos, una mañana de sábado me fui a Tigre (cerca de la zona del Puerto de Frutos) y encontré una muy linda, que encargué con algunas modificaciones.

Elegí que tuviera solo 20cm de ancho, para que no ocupara tanto espacio en el pequeño pasillo de entrada. El estilo del mueble no es escandinavo, porque quise cortar un poco y sumar algo diferente. Si mantuve el color blanco y las líneas rectas en la tapa de la mesa. Los dos cajones tienen buen espacio (aunque no los voy a usar por el momento!) y seguramente voy a cambiar los tiradores, cuando tenga oportunidad.

[subtitle] HABITACIÓN [/subtitle]

Encontrar las mesas de luz fue un desafío. Dentro de la línea de diseño escandinavo había muchos modelos que me gustaban, pero la mayoría estaba muy por fuera del presupuesto que tenía destinado (muy por fuera). Me tomé mi tiempo y busqué mucho, hasta que encontré un modelo que me gustó y que tenía un precio que estaba dispuesta a pagar. El tema con las mesas de luz es, justamente, que se trata de ítem en plural y los presupuestos generalmente eran por una sola unidad. Mi elegido fue un modelo de Jacintaculebra, que descubrí en Mercado Libre. Se puede pedir de varios colores, pero opté por el blanco, con tiradores en plateado. Lo encargué y estuvo listo en el tiempo que me habían dicho. Fue una muy buena compra!
El modelo no solo me pareció lindo, sino que su tamaño era ideal para el espacio que tenía. También me resultó liviano, con las patas cruzadas y con un solo cajón. Después de varios meses de usarla estoy feliz con la elección. Tiene un buen espacio para apoyar el control remoto, un vaso de agua y el velador. Además, el hecho de que tenga un solo cajón me previene de acumular cosas sin necesidad y solo tengo un bálsamo labial, crema de manos e ibuprofeno.

Mis sugerencias:
– Busquen inspiración  y planeen los espacios.
– Si bien me mudé con bastantes muebles comprados, la elección de dejar varios sin comprar fue la mejor. De esa forma pude «sentir la necesidad» de sumar muebles que realmente necesito y con un tamaño adaptado, sin recargar los ambientes.
– Consulten varios presupuestos antes de tomar una decisión. Hagan un estudio real de las ofertas del mercado y evalúen cada aspecto: precio, calidad, formas de pago, posibles descuentos (envío, pago en efectivo, etc). No siempre lo más caro es lo mejor, pero tampoco lo barato lo es.
– Consulten recomendaciones de amigos sobre proveedores y sus experiencias con ellos.
– Si no quieren o pueden comprar muebles nuevos, estén atentos a subastas, ventas por mudanza, ventas por divorcio (las hay!) y todo tipo de oportunidades.
– Disfruten del proceso de decorar sus espacios y de darles, también, su toque personal.

Espero que les haya gustado este post y que les sea útil. En próximas publicaciones les voy a mostrar otros muebles que tengo, que hice yo misma o que mejoré. Me encantaría saber si les gusta este tipo de post y que me cuenten cómo hicieron ustedes en sus casas!