Lucir frescas, despiertas y sin ojeras es una obsesión para algunas mujeres que, en momentos de exposición pública, deciden tapar el problema con más productos de los que necesitan. Puede que bajo la luz del baño todo parezca perfecto pero, en el momento en el que el flash de una cámara las ilumina la perfección se vuelve blanca y se nota. En este post comparto con ustedes algunos ejemplos de éste tipo de error y les propongo algunos consejos para evitarlo.

Qué podemos hacer:
– Evitar la aplicación en exceso de polvo sobre el cubre ojeras.
– Chequear el maquillaje en luz natural antes de salir (balcón, patio, jardín, sacar la cabeza por la ventana…algo!)
– Si vamos a una fiesta, podemos sacarnos alguna foto con flash antes de salir para chequear cómo sale el maquillaje. Nadie quiere ver las fotos después y darse cuenta de que tenía círculos blancos debajo del ojo.
– Después de colocar el cubre ojeras es mejor aplicar polvo translúcido en lugar de uno con color o tonalizado.
– Cuando compramos un cubre ojeras lo mejor es asesorarse y dejar que las vendedoras nos asistan. Si bien nos puede parecer que nos quieren vender todo, la ayuda que ellas nos puedan dar nos sirve para encontrar el color indicado.

Espero que les haya gustado el post! Gracias!